Aunque las Enfermedades de Transmisión Sexual son menos corrientes en la comunidad lesbiana que en cualquier otra, ocurren con la frecuencia suficiente como para que la mujer sexualmente activa se inquiete por ellas. Algunas de las ETS que vamos a tratar en este apartado se transmiten con más facilidad a través del sexo entre mujeres.
Sin embargo, y teniendo en cuenta que las lesbianas están constantemente redefiniendo y ampliando las barreras del sexo femme-to-femme, y como algunas, a pesar de autodefinirse lesbianas siguen acostándose con hombres, todas las ETS que se incluyen aquí pueden considerarse riesgos potenciales.
Muchas de las enfermedades que vamos a nombrar provocan pocos síntomas en las mujeres. Por esta razón, las lesbianas sexualmente activas y que no practiquen la monogamia, (especialmente aquellas que tengan contactos sexuales con hombres) deberían hacerse un chequeo médico con regularidad -aunque sólo sea una vez al año haciéndolo coincidir con el análisis citológico-.
También sería recomendable estar al tanto de los descubrimientos y remedios científicos que vayan apareciendo, relacionados con cualquier enfermedad. Contraer una enfermedad de transmisión sexual no convierte a una persona en mala, al igual que si coge un resfriado. Pero en cualquier caso eso no exime del deber de informar a tu pareja si padeces alguna enfermedad antes de empezar la vida sexual juntas. Tomar precauciones no impide el contacto físico. Si descubres que padeces alguna ETS, comunícaselo a las parejas que hayas tenido hasta el momento para que se hagan un reconocimiento y se traten si es necesario. También es tu deber prevenir a aquellas/os que vivan contigo o a las visitas recientes:
AMEBIASIS.
Se transmite normalmente a través de la práctica del anilingus. Esta enfermedad puede ser resultado de cualquier práctica sexual donde las heces estén infectadas por amebas y la boca de la pareja entre en contacto con ello. Algunas personas padecen amebiasis sin presentar ningún síntoma, por eso es posible contraerlo a través de alguien que no ae ninguna anomalía. Los síntomas, cuando aparecen, incluyen diarrea con sangre y calambres abdominales. La amebiasis es difícil de diagnosticar y de tratar; no hay un medicamento que sea cien por cien efectivo. La Giardiasis, que aparece más frecuentemente en hombres gays, es una enfermedad parecida. La Shigelosis, infección bacteriana, también se propaga mediante el contacto anal-oral y puede que no produzca síntomas, pero en caso de que aparezcan, éstos se presentarán en forma de fiebre repentina o diarrea. Al contrario que la amebiasis y la giardiasis, la shigelosis puede desaparecer sola con el tiempo; sin embargo se recomienda beber líquidos en cantidad si la diarrea persiste, así como tomar algún medicamento conveniente, pero sólo bajo prescripción médica.
CLAVOS.
Su causa puede ser un virus. Los clavos venéreos se transmiten a través del contacto manual-genital o manual-anal. Una vez que encuentran cobijo en el ser humano, se reproducen alrededor del punto inicial. Aunque los clavos anales provocan picores y puede que sangren durante la defecación o la penetración anal, no suelen doler. Las posibilidades de tratamiento incluyen el medicamento Podophyllin, rayos láser y cirugía. Los clavos son resistentes y por ello a veces se necesitará aplicar más de un tratamiento entre los mencionados. Si no se tratan, los clavos pueden llegar a ser cancerígenos.
CHLAMYDIA.
La Cblamydia trachomatis no suele presentar síntomas; sólo cuando se ha extendido por la trompa de falopio y ha causado inflamación en la pelvis se puede diagnosticar con certeza. La Chlamydia se combate con antibióticos. Si alguna vez has mantenido relaciones sexuales con hombres sin usar preservativos, sería recomendable que te hicieras un reconocimiento médico para eliminar dudas.
CISTITIS.
La cistitis -también conocida como infección urinaria-, no es una enfermedad de transmisión sexual en sí misma, aunque suele ser causada por una actividad vaginal fuerte o penetración sin suficiente lubricante. La cistitis también puede ser resultado de una infección en la entrada de la uretra, lo que en ocasiones se produce por llevar ropa demasiado apretada. La cistitis presenta dos síntomas principales; ganas de orinar con frecuencia (prácticamente estás todo el día en el servicio) y una incómoda sensación de ardor al intentarlo. Puede que aparezcan también molestias abdominales y en los riñones. Los medicamentos sulfa curan la cistitis. Sin embargo, las mujeres de origen africano no deberían tomar estas drogas antes de hacerse un análisis para asegurarse de que no padecen una deficiencia de la enzima G6PD en la sangre; si careces de esta enzima, los medicamentos sulfa podrían ser mortales. Tomar líquidos en cantidad, especialmente agua y zumo de arándano y evitar el alcohol y la cafeína, ayuda a aliviar la cistitis. La vitamina C también cumple su papel, así como llevar ropa interior de algodón. Para algunas mujeres estas medidas serán suficientes para terminar con la cistitis sin necesidad de medicación.
GONORREA.
La Gonorrea, que puede ser tratada con antibióticos, a menudo no presenta síntomas hasta que la pelvis se inflama, pero si hay señales, éstas serán supuraciones anales o vaginales y síntomas de resfriado. Aunque la Gonorrea es poco corriente en la comunidad lesbiana, siempre hay casos, y puede ocurrir que alguien contagie la enfermedad sin tener ningún síntoma. Si mantienes varias relaciones sexuales a un tiempo, considera el hacerte un chequeo anual haciéndolo coincidir con el análisis citológico.
HEPATITIS.
Mientras que la hepatitis A se contagia a través de la materia fecal, la B aparece en fluidos corporales y se transmite de una manera parecida al VIH. Con todo, la hB se contagia con más facilidad que el VIH, y la infección puede ser causada por la práctica de sexo oral o incluso por beber del mismo vaso o utilizar un cepillo de dientes que no sea el tuyo. La hA se contagia por beber agua contaminada, alimentos con gérmenes o marisco crudo. Los síntomas de ambas hepatitis son: dolor de cabeza, pérdida del apetito, dolor en las articulaciones y erupciones cutáneas en una primera fase. Más adelante aparecerá un tono amarillo en la cara y en toda la piel -conocido como ictericia- y orina oscura. Tanto la hepatitis A como la B pueden ser tratadas con reposo y cuidados. Las personas que padezcan hepatitis deben evitar el alcohol y tomar medicación sin control médico. También tendrán que disponer de toallas, sábanas, platos, cubiertos, etc., de uso exclusivamente personal para evitar el contagio de la enfermedad. Los afectados con hepatitis no deben nunca preparar comida para otras personas.
HERPES.
El virus Herpes Simplex I (HS 1) suele causar calenturas en la boca, mientras que el Herpes Simplex II (HS II) las produce en los genitales. Sin embargo, a través del sexo oral se puede transmitir fácilmente HS I a los genitales y la boca puede ser infectada por un HS II. El Herpes se contagia normalmente cuando el brote es visible, aunque hay gente que lo cree transmisible un día o dos antes. Entre períodos de epidemias, el virus permanece latente y su manifestación es facilitada por el estrés, enfermedades, fricción y menstruación. Las calenturas que el herpes produce se presentan en forma de ampollas o úlceras; en la boca, en la garganta o en la vagina, y aunque pueden tomar distintas formas, todas ellas son bastante molestas. Si aparecen marcas o bultos en los genitales, ve directamente a consultar al médico. Puede que te surjan picores o sarpullidos en la zona infectada o síntomas de resfriado, como dolor de cabeza, fiebre, y vómitos. Aunque no existe un remedio preciso para esta enfermedad, el medicamento Acyclovir reduce las molestias y frena la erupción.
HONGOS.
También conocidos como candidiasis o monilia, los hongos se pueden transmitir de mujer a mujer a través de la actividad sexual, del uso compartido de ropa, toallas y asientos de water; también pueden aparecer por ingestión excesiva de azúcar, estrés, por tomar ciertas medicinas o por llevar ropa demasiado ajustada. En cuanto a los síntomas, el principal se presenta en forma de descarga vaginal de aspecto parecido al requesón, acompañada de un picor muy molesto. Los medicamentos para tratar los hongos se pueden adquirir sin receta médica aunque la primera vez que se contraiga deberá ser diagnosticado por un médico para un tratamiento concreto. Si vas a usar el medicamento OTC, guarda el aplacador por si pudiera servirte para otras posibles infecciones. Si quieres tratarte los hongos tú misma, inserta dos cucharadas de yogurt natural y sin azúcar en la vagina dos veces al día utilizando el aplicador vaginal. Usa un tampón para mantener el yogurt dentro. Los aplicadores vaginales también suelen venderse junto a cremas espermicidas Los hongos que causan la infección permanecen en el cuerpo todo el tiempo; la infección surge cuando algún agente externo altera el equilibrio del organismo, como ocurre al ingerir antibióticos. Se recomienda toma yogurt diariamente cuando se está bajo tratamiento de antibióticos para que la medicación no se incline a favor de la infección. En términos generales: Si tienes picores, hinchazones, manchas rojizas o padeces algún otro síntoma genital, olvida el mito de la lesbiana inmune y hazte un chequeo médico. Si practicas el sexo activo con más de una pareja, hazte un reconocimiento para detectar cualquier posible Enfermedad de Transmisión Sexual aprovechando el análisis citológico anual.
LADILLAS.
De todas las enfermedades de transmisión sexual ésta es la que se transmite con mayor facilidad. Se puede contagiar con el simple hábito de compartir una toalla o un asiento de water. Aproximadamente un mes después de contagiarse, estas diminutas criaturas que se pueden ver sin necesidad de un microscopio, causan un escozor bastante desagradable en el área púbica. Gamma benzene hexachloride es el medicamento que se suele prescribir para combatir ladillas. Para una recuperación más rápida conviene afeitarse el vello púbico y así eliminar las huevas de ladilla que de lo contrario se formarían cómodamente entre el pelo. A partir de ahí, la higiene personal deberá convertirse en un hábito riguroso; ropa interior y exterior, sábanas, etc., tendrán que lavarse en agua hirviendo. Informa a tu pareja y a la gente que viva contigo para prevenirles.
SARNA.
La sarna es producida por parientes microscópicos de las arañas y se transmite a través del contacto sexual, o por usar toallas y sábanas de alguien que lo padezca. Los picores (particularmente molestos durante la noche) aparecen en un período aproximado de un mes después de la infección. Al igual que con las ladillas, el medicamento Kwell es el más apropiado; pero teniendo en cuenta que estos microorganismos depositan las huevas subcutáneamente, el tratamiento debe aplicarse por todo el cuerpo, dejándolo reposar al menos durante un día y aplicándolo una segunda vez después de diez días para eliminar el resto de las crías. La crema debe llegar incluso al interior de las uñas. Cualquier prenda que haya estado en contacto con la zona infectada debe lavarse. A la pareja y a aquellos que habiten en la misma casa se les ha de prevenir para evitar contagios. Incluso después de que la sarna haya desaparecido, los picores pueden persistir durante un tiempo. Si a estos picores les acompañan marcas rojas o ampollas, entonces sería conveniente repetir el tratamiento.
SÍFILIS.
Ésta es un enfermedad que produce pocos síntomas entre las mujeres, -aunque el caso de sífilis que quede sin tratar puede ser mortal-. Causada por un retorcido y delgado microorganismo, en la primera fase puede aparecer una úlcera sin dolor alrededor de la vagina. En una segunda fase, los síntomas incluyen sarpullidos, inflamación de nodos linfáticos, pérdida de cabello, y resfriado, o puede que no aparezcan ninguno de estos síntomas. Dejar la sífilis sin tratar puede causar locura o incluso la muerte. La mayoría de los casos de sífilis se pueden tratar con antibióticos. Si eres una persona sexualmente activa y con más de una pareja, hazte un chequeo médico al menos una vez al año.
TRICOMONIASIS.
Entre cuatro y veintiocho días después de la infección, la tricomoniasis produce un picor realmente vivo así como una descarga vaginal verdosa y de un olor desagradable. Los genitales se tornan rojizos y al orinar surge un dolor muy molesto. Esta enfermedad es fácilmente transmisible a través del contacto sexual, ropa, toallas y asientos de water. Para combatirla se prescribe el medicamento Flagyl, que por otra parte suele producir náuseas y dolores de cabeza. No se puede ingerir alcohol durante el tratamiento así como unos días antes y después del mismo."
(Extraído del "Manual de Sexo Lésbico")
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