Ecuador: Expulsan de Liga a equipo lésbico de fútbol por celebrar con un beso

Una injusticia más a la cual muchas estamos expuestas, sea fútbol o cualquier otro deporte. Un beso  entre mujeres no es nada malo ni para los niños, ni para los adultos,  es hora que la sociedad aprenda a verlo como algo normal, real y común. Obvio sin excesos, y esto es tanto para lesbianas como gays, bisexuales y heterosexuales (no vale antojar ;)...).

(Ole).- En Ecuador, un equipo de fútbol de lesbianas fue expulsado de una liga porque dos jugadoras festejaron un gol besándose en la boca. Karen Barba, capitana, lo compara con los picos entre Diego y Cani, cuenta que hasta las filmaron en el vestuario y que en su país existen “clínicas para curar la homosexualidad”.

En un Ecuador que está en la tapa de todos los diarios por el intento de golpe de estado, hay un equipo que lucha por sus derechos. Ya el nombre es inverosímil para un cuadro de fútbol: Saltamontes de Venus. No remite al canal condicionado. Sí remite a esa parte de la anatomía femenina precisamente muy valorada por ese canal de cable.

En este equipo juegan mujeres. Cajeras de supermercados, estudiantes, diseñadoras gráficas, enfermeras, amas de casa... Mujeres que, en su mayoría, son lesbianas.

Ellas participaban del torneo femenino de La Floresta, una liga barrial de Quito. Canchas de tierra, tribunas con papás, mamás y hermanos; bailes de fin de año, desfiles con elección de la reina del torneo... Karen Barba nunca desfiló. Su historia pasa por otro lado.

Hincha de la Liga Universitaria de Quito y admiradora de Antonio Valencia (jugador del Manchester United), es estudiante de Derecho y transpira la camiseta corriendo atrás de una pelota. “El fútbol se convirtió en un punto de encuentro para nosotras”, dice. “Nosotras” es este equipo del Saltamontes de Venus.

Este equipo que fue suspendido por la Liga. Todo empezó cuando varias de sus jugadoras declararon su orientación sexual. “Lo hicimos -dice Karen- para transformar al equipo en un espacio en el que las lesbianas pudieran ir al fútbol en paz”.

Pero lo que estalló fue la guerra. Porque el Saltamontes quedó bajo la intolerante mirada de los organizadores y la celebración de un gol con un beso detonó su expulsión del torneo.

-¿Sabías que Maradona y Caniggia festejaban los goles dándose un pico en la boca? A ellos nadie los expulsó...

Esto me dice que se continúa persiguiendo a los gays, lesbianas, transexuales... En el beso de Maradona y Caniggia nunca se llegó a cuestionar su orientación sexual, por eso es legítima su manifestación de gol. Pero si el beso se lo dan dos mujeres, y dos mujeres lesbianas, ahí son inmorales, obscenas...

-¿Las atacaron mucho?

Sufrimos persecuciones, violaciones a nuestra intimidad, acusaciones injuriosas, agresiones alusivas a nuestra orientación sexual. Nos llegaron a filmar en los camarinos. Y a nadie le alarmó esa invasión a nuestra privacidad. Es más, se convirtió en una forma de control hacia nosotras.

Por más descabellado que suene, los directivos justificaban las filmaciones en nuestros camerinos y baños para demostrar supuestos actos inmorales y obscenos. Uno de los directivos, el señor Julio Villalba, representante del Club Lisboa, dijo: “Si se llega a comprobar que hay alguna lesbiana en un equipo debe sancionarse al equipo completo”.

Ya sancionado, el Saltamontes de Venus denunció el caso ante la Justicia. El abogado de la Liga La Floresta, Félix Zambrano (que juega de 10 en uno de los equipos del torneo masculino), argumentó que no fueron expulsadas por su orientación sexual, sino por un comportamiento que atenta “contra la moral y las buenas costumbres”.

-¿Cómo es la sociedad ecuatoriana? ¿Pensás que en un futuro próximo podría aprobarse, como en la Argentina, una ley de matrimonio igualitario?

Aún no. La sociedad reacciona con temor y violencia hacia la orientación sexual. Todavía vivimos en indefensión y subordinación. Y se llega al extremo de que aún existan centros que rehabilitan homosexuales.

Con respecto a esto, un artículo del diario El Universo de Guayaquil (de mayo del 2008) precisa que en Ecuador existen 140 de estos centros que ofrecen “quitar” la homosexualidad, con métodos extremos e ilegales. Desde encierros forzados, golpes e insultos, hasta shock de electricidad, pasando por fármacos e inyección de hormonas...

-¿Pensás que podrán volver a jugar?

La Liga con todos sus peros se convirtió en un punto de encuentro. No podemos ceder espacios al poder. Estamos en rebeldía. ¡En rebeldía!

(Fuente: Olé)