Con la exigencia para que termine la violencia en Ciudad Juárez - Mexico, lesbianas de todas las edades marcharon del Zócalo capitalino (Distrito Federal) al Monumento a la Revolución.
México, DF.- Tras dos años de ausencia, la Cuarta Marcha Lésbica tomó el pasado 21 de marzo las calles de la Ciudad de México en una movilización pacífica e irreverente con una amplia participación de mujeres de todas las edades, en especial jóvenes, de varios estados de la República mexicana y de otros países como Estados Unidos y Brasil.
De acuerdo al comité organizador, este año se reunieron cerca de "cinco mil" personas en favor de los derechos de lesbianas, en medio de un ambiente de lucha política, con una buena organización, festividad y orgullo.
"Este lleno total es una cifra récord", anunció la conductora del acto político - cultural con el que concluyó la manifestación y en el que se leyeron pronunciamientos de grupos lésbicos de toda la República mexicana.
Una participación "especial" tuvo la madre de una mujer asesinada en Ciudad Juárez, quien agradeció el respaldo del movimiento lésbico y condenó los hechos de violencia que viven las mujeres en esa localidad. Tan sólo este año, apuntó, van 20 ejecuciones y 17 desapariciones.
Desde las tres de la tarde, los tambores de la Lesbian Banda fueron los encargados de identificar el punto de reunión para el contingente lésbico, que acrecentado recorrió la calle de Madero, en el Centro Histórico, hasta abrirse paso en el Zócalo capitalino.
Las banderas arcoiris, así como las consignas de “Banquetera únete, closetera únete”, llamaron la atención de decenas de curiosos. En las aceras algunas personas mostraban su desacuerdo por ver a mujeres besarse con otras féminas.
A las cuatro de la tarde el contingente encabezado por Yan María Castro, miembro del Comité de la Marcha Lésbica -Comal-, salió con rumbo al Monumento a la Revolución.
Contrario a ediciones anteriores de la marcha, esta vez la presencia de jóvenes, adolescentes, madres lesbianas acompañadas por sus hijos, y feministas de antaño, fue aumentando a medida que el contingente avanzaba.
Los transeúntes sirvieron de protección para el grupo de mujeres que entre sus cánticos y porras denotaban sus exigencias, entre las cuales resaltaban el respeto a las lesbianas, a sus manifestaciones pacíficas, a la maternidad lésbica, al matrimonio entre mujeres y la adopción, entre otras.
“Salimos a las calles a pesar de que el ‘gobierno liberal del DF’ intentó detenernos, puesto que chocábamos con su festival de primavera, pero como es un derecho constitucional no nos pudieron impedir salir hoy , esto a pesar que hoy intentamos despejarnos del Zócalo e impedir la instalación del templete en Revolución”, comentó Mariana Pérez Ocaña, también miembro del Comal.
Sin importar los obstáculos, alrededor de las 16:30 horas la avenida Juárez se convirtió en un tapete lésbico que ondeaba banderas arcoiris, pancartas que pedían un alto a los feminicidios en Ciudad Juárez; voces de adolescentes que pedían a sus padres no ser golpeadas por su orientación sexual; y el movimiento de todo el contingente que pedía “feminismo pa’ delante y machismo para atrás”.
Alrededor de las 5:30 de la tarde la explanada del Monumento a la Revolución comenzó a tapizarse con las más de 5 mil mujeres que al arribar, hicieron un beso colectivo, cumpliéndose el lema de la Marcha en su edición 2009: “En cada beso una revolución”.
(Fuente: Anodis.com)
México, DF.- Tras dos años de ausencia, la Cuarta Marcha Lésbica tomó el pasado 21 de marzo las calles de la Ciudad de México en una movilización pacífica e irreverente con una amplia participación de mujeres de todas las edades, en especial jóvenes, de varios estados de la República mexicana y de otros países como Estados Unidos y Brasil.
De acuerdo al comité organizador, este año se reunieron cerca de "cinco mil" personas en favor de los derechos de lesbianas, en medio de un ambiente de lucha política, con una buena organización, festividad y orgullo.
"Este lleno total es una cifra récord", anunció la conductora del acto político - cultural con el que concluyó la manifestación y en el que se leyeron pronunciamientos de grupos lésbicos de toda la República mexicana.
Una participación "especial" tuvo la madre de una mujer asesinada en Ciudad Juárez, quien agradeció el respaldo del movimiento lésbico y condenó los hechos de violencia que viven las mujeres en esa localidad. Tan sólo este año, apuntó, van 20 ejecuciones y 17 desapariciones.
Desde las tres de la tarde, los tambores de la Lesbian Banda fueron los encargados de identificar el punto de reunión para el contingente lésbico, que acrecentado recorrió la calle de Madero, en el Centro Histórico, hasta abrirse paso en el Zócalo capitalino.
Las banderas arcoiris, así como las consignas de “Banquetera únete, closetera únete”, llamaron la atención de decenas de curiosos. En las aceras algunas personas mostraban su desacuerdo por ver a mujeres besarse con otras féminas.
A las cuatro de la tarde el contingente encabezado por Yan María Castro, miembro del Comité de la Marcha Lésbica -Comal-, salió con rumbo al Monumento a la Revolución.
Contrario a ediciones anteriores de la marcha, esta vez la presencia de jóvenes, adolescentes, madres lesbianas acompañadas por sus hijos, y feministas de antaño, fue aumentando a medida que el contingente avanzaba.
Los transeúntes sirvieron de protección para el grupo de mujeres que entre sus cánticos y porras denotaban sus exigencias, entre las cuales resaltaban el respeto a las lesbianas, a sus manifestaciones pacíficas, a la maternidad lésbica, al matrimonio entre mujeres y la adopción, entre otras.
“Salimos a las calles a pesar de que el ‘gobierno liberal del DF’ intentó detenernos, puesto que chocábamos con su festival de primavera, pero como es un derecho constitucional no nos pudieron impedir salir hoy , esto a pesar que hoy intentamos despejarnos del Zócalo e impedir la instalación del templete en Revolución”, comentó Mariana Pérez Ocaña, también miembro del Comal.
Sin importar los obstáculos, alrededor de las 16:30 horas la avenida Juárez se convirtió en un tapete lésbico que ondeaba banderas arcoiris, pancartas que pedían un alto a los feminicidios en Ciudad Juárez; voces de adolescentes que pedían a sus padres no ser golpeadas por su orientación sexual; y el movimiento de todo el contingente que pedía “feminismo pa’ delante y machismo para atrás”.
Alrededor de las 5:30 de la tarde la explanada del Monumento a la Revolución comenzó a tapizarse con las más de 5 mil mujeres que al arribar, hicieron un beso colectivo, cumpliéndose el lema de la Marcha en su edición 2009: “En cada beso una revolución”.
(Fuente: Anodis.com)
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