
Con apenas ocho años, Josie Romero ya fue diagnosticada como una niña transgénero, una de las más jovenes en Estados Unidos y del mundo. Cuando comenzó a hablar, sus padres recuerdan que Joey —su antiguo nombre masculino— se refería a sí misma como una niña y ellos trataban de corregirla.
Cuando cumplió 5 años, decidieron contarle su caso al pediatra, quien los envió con un especialista. Tras rigurosos exámenes se le diagnosticó disforia de género. “Yo había llorado la pérdida de mi hijo. Cuando hablé con él, supe que había ganado una hija”, declaró su padre, quien es ingeniero de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, al periódico inglés The Sun.

“Ser una niña es bueno para mi porque me permite hornear y cocinar, llevar el cabello largo y usar aretes”, expresó la pequeña que a los 12 años empezará a tomar hormonas femeninas.
Los padres aclararon que antes de tomar la decisión, el caso de su hijo fue analizado por un especialista que confirmó que el caso de Joey —ahora Josie— era un caso de transexualidad.
Josie ya fue reconocida legalmente como niña, su nombre y género fueron modificados en el acta de nacimiento, pero tendrá que esperar a cumplir doce años para comenzar un tratamiento hormonal y posteriormente, ser sometida a una cirugía de reasignación de sexo.
(Fuente: agmagazine.info)
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