Cuando hablamos sobre temas de salud, es muy frecuente mencionar el cáncer como una de las enfermedades más devastadoras. Sin embargo, es bueno aclarar que este mal tan temido no se refiere exclusivamente a una sola enfermedad. Existen más de 200 tipos de cánceres reconocidos, todos con características particulares que requieren de atención especial. En este artículo hablaremos con particular atención sobre uno de los cánceres más temidos: el cáncer de mama.
¿Qué es el cáncer?
Antes de entrar en ese tema, es necesario repasar cómo se produce el cáncer. Por lo general, esta condición se describe como un crecimiento y una propagación descontrolada de células anormales en alguna parte del cuerpo. Como sabemos, todos los organismos vivos están compuestos por una o más células que se dividen para reproducirse sólo cuando es necesario. En algunas ocasiones, estas células continúan dividiéndose y se multiplican de manera no deseable. Cuando esto ocurre, se forma una masa de tejido adicional que se denomina tumor. Los tumores pueden ser de tipo benigno, pero del mismo modo pueden considerarse como malignos. En el caso de que clínicamente se determine que un tumor es maligno, esto es, que pueda provocar daños al funcionamiento aceptable del cuerpo, entonces se considera como cáncer.
El cáncer de mama: tipos más comunes
Con la excepción del cáncer de piel, el cáncer de seno o carcinoma de mama es la forma de cáncer más frecuentemente diagnosticada entre las mujeres del mundo. Existen diferentes tipos de cáncer de mama: uno de ellos es el carcinoma ductual, que comienza en el revestimiento de los conductos que llevan leche al pezón y es responsable por más del 75% de los cánceres de mama diagnosticados. También existe el cáncer lobular, que comienza en las glándulas secretoras de leche, aunque su comportamiento es muy similar al carcinoma ductual. Otras variedades de cáncer de mama pueden desarrollarse en la piel, en la grasa de los tejidos conectivos y en otras células presentes en las mamas.
Es importante recalcar que el cáncer de mama no es una condición de salud que afecta solamente a las mujeres. Aún cuando menos del 1% de los casos ocurren en hombres, ésta es una población que también está en riesgo de padecerlo, sobre todo por el factor desconocimiento. Por eso, hay que promover la prevención y la identificación temprana del cáncer de mama en todas las poblaciones.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Como sucede en la mayoría de los tipos de cáncer, la edad es un factor muy importante a la hora de ponderar las posibilidades de riesgo. Se sabe que más del 80% de todos los casos de cáncer de mama ocurren en mujeres de 50 años o más, ya que se relaciona directamente a fluctuaciones en la producción de hormonas propias de la menopausia. Sin embargo, existen otros factores de riesgo, como la genética y los antecedentes familiares. Se ha determinado, a través de numerosos estudios, que en algunas familias existe una cierta predisposición genética para desarrollar este tipo de condición.
El cáncer de mama en la comunidad gay
No podemos decir que existen herramientas científicas que permitan promover la salud cuando nos referimos al impacto del cáncer de mama en grupos que son considerados como minorías. Un ejemplo claro de esto es el caso de las lesbianas, para quienes todavía hay muchos mitos sobre cuáles son las prácticas de prevención más efectivas, así como los niveles de eficacia al realizarse el auto-examen de las mamas. Peor aún, no existen estadísticas precisas sobre cuántas mujeres lesbianas son afectadas por esta condición de salud. Esto es un hecho que, sin dudas, obstaculiza los esfuerzos de prevención en estas comunidades, ya que las autoridades de la salud necesitarían saber estas cifras, de manera que se cumpla el interés de promover la salud para tod@s.
Aún cuando podamos percibir que no estamos a riesgo, ya sea por sexo, edad o herencia, hay muchos otros factores que pueden influir en la posibilidad de desarrollar cáncer de mama. Entre estos factores, se incluye la menarquia o menopausia tardía, el uso de anticonceptivos orales, el consumo de alcohol y la exposición a agentes químicos o radiación.
¿Por qué es importante informarse?
Reconocer y entender los riesgos que cada persona pueda tener para desarrollar cáncer de mama es esencial para su prevención. Por muchos años, el auto-examen de mama ha sido una práctica muy común y efectiva en este proceso. A través de la palpación del área de la mama, se pueden detectar posibles indicaciones para el desarrollo anormal de las células. En la imagen, se explica la forma correcta para realizar un auto-examen del área de la mama en una mujer, la palpación que deben hacer los hombres es similar.
El cáncer de mama es problema de tod@s
Ya hemos mencionado que el cáncer de mama no discrimina entre géneros, como tampoco lo hace por clases sociales, cualidades o preferencias. Sin embargo, sabemos que puede enfrentarse con valentía cuando se descubre a tiempo y se le enfrenta con firmeza. Entre las historias exitosas sobre cómo vencer esta terrible condición de salud, nos sirven de ejemplo e inspiración la rockera estadounidense Melissa Etheridge y la cantante australiana Kylie Minogue. Ambas mujeres, además de ser íconos de sus respectivos géneros musicales, sobrevivieron a la enfermedad y se han convertido en colaboradoras incansables en su erradicación. Sobre todo, ambas han reiterado el mensaje de que la prevención, la detección temprana y el tratamiento adecuado son elementos importantes para preservar la salud individual y para fomentar el bienestar de todas las comunidades.
Tod@s somos responsables de promover un buen estado de salud. Esto significa que, aún cuando pensemos que no estamos en riesgo y el auto-examen parezca indicar que todo está bien, debemos consultar a nuestro médico de cabecera para que nos realice pruebas clínicas que nos permitan evaluar nuestra situación de salud. Además, como miembros de una comunidad, debemos promover que otras personas, incluyendo familiares, compañer@s y amig@s, gocen del mejor estado de salud posible. Aunque todavía no existe una cura para este mal, la prevención sigue siendo nuestra mejor defensa.
(Fuente: orgulloboricua.net)
¿Qué es el cáncer?
Antes de entrar en ese tema, es necesario repasar cómo se produce el cáncer. Por lo general, esta condición se describe como un crecimiento y una propagación descontrolada de células anormales en alguna parte del cuerpo. Como sabemos, todos los organismos vivos están compuestos por una o más células que se dividen para reproducirse sólo cuando es necesario. En algunas ocasiones, estas células continúan dividiéndose y se multiplican de manera no deseable. Cuando esto ocurre, se forma una masa de tejido adicional que se denomina tumor. Los tumores pueden ser de tipo benigno, pero del mismo modo pueden considerarse como malignos. En el caso de que clínicamente se determine que un tumor es maligno, esto es, que pueda provocar daños al funcionamiento aceptable del cuerpo, entonces se considera como cáncer.
El cáncer de mama: tipos más comunes
Con la excepción del cáncer de piel, el cáncer de seno o carcinoma de mama es la forma de cáncer más frecuentemente diagnosticada entre las mujeres del mundo. Existen diferentes tipos de cáncer de mama: uno de ellos es el carcinoma ductual, que comienza en el revestimiento de los conductos que llevan leche al pezón y es responsable por más del 75% de los cánceres de mama diagnosticados. También existe el cáncer lobular, que comienza en las glándulas secretoras de leche, aunque su comportamiento es muy similar al carcinoma ductual. Otras variedades de cáncer de mama pueden desarrollarse en la piel, en la grasa de los tejidos conectivos y en otras células presentes en las mamas.
Es importante recalcar que el cáncer de mama no es una condición de salud que afecta solamente a las mujeres. Aún cuando menos del 1% de los casos ocurren en hombres, ésta es una población que también está en riesgo de padecerlo, sobre todo por el factor desconocimiento. Por eso, hay que promover la prevención y la identificación temprana del cáncer de mama en todas las poblaciones.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Como sucede en la mayoría de los tipos de cáncer, la edad es un factor muy importante a la hora de ponderar las posibilidades de riesgo. Se sabe que más del 80% de todos los casos de cáncer de mama ocurren en mujeres de 50 años o más, ya que se relaciona directamente a fluctuaciones en la producción de hormonas propias de la menopausia. Sin embargo, existen otros factores de riesgo, como la genética y los antecedentes familiares. Se ha determinado, a través de numerosos estudios, que en algunas familias existe una cierta predisposición genética para desarrollar este tipo de condición.
El cáncer de mama en la comunidad gay
No podemos decir que existen herramientas científicas que permitan promover la salud cuando nos referimos al impacto del cáncer de mama en grupos que son considerados como minorías. Un ejemplo claro de esto es el caso de las lesbianas, para quienes todavía hay muchos mitos sobre cuáles son las prácticas de prevención más efectivas, así como los niveles de eficacia al realizarse el auto-examen de las mamas. Peor aún, no existen estadísticas precisas sobre cuántas mujeres lesbianas son afectadas por esta condición de salud. Esto es un hecho que, sin dudas, obstaculiza los esfuerzos de prevención en estas comunidades, ya que las autoridades de la salud necesitarían saber estas cifras, de manera que se cumpla el interés de promover la salud para tod@s.
Aún cuando podamos percibir que no estamos a riesgo, ya sea por sexo, edad o herencia, hay muchos otros factores que pueden influir en la posibilidad de desarrollar cáncer de mama. Entre estos factores, se incluye la menarquia o menopausia tardía, el uso de anticonceptivos orales, el consumo de alcohol y la exposición a agentes químicos o radiación.
¿Por qué es importante informarse?
Reconocer y entender los riesgos que cada persona pueda tener para desarrollar cáncer de mama es esencial para su prevención. Por muchos años, el auto-examen de mama ha sido una práctica muy común y efectiva en este proceso. A través de la palpación del área de la mama, se pueden detectar posibles indicaciones para el desarrollo anormal de las células. En la imagen, se explica la forma correcta para realizar un auto-examen del área de la mama en una mujer, la palpación que deben hacer los hombres es similar.
El cáncer de mama es problema de tod@s
Ya hemos mencionado que el cáncer de mama no discrimina entre géneros, como tampoco lo hace por clases sociales, cualidades o preferencias. Sin embargo, sabemos que puede enfrentarse con valentía cuando se descubre a tiempo y se le enfrenta con firmeza. Entre las historias exitosas sobre cómo vencer esta terrible condición de salud, nos sirven de ejemplo e inspiración la rockera estadounidense Melissa Etheridge y la cantante australiana Kylie Minogue. Ambas mujeres, además de ser íconos de sus respectivos géneros musicales, sobrevivieron a la enfermedad y se han convertido en colaboradoras incansables en su erradicación. Sobre todo, ambas han reiterado el mensaje de que la prevención, la detección temprana y el tratamiento adecuado son elementos importantes para preservar la salud individual y para fomentar el bienestar de todas las comunidades.
Tod@s somos responsables de promover un buen estado de salud. Esto significa que, aún cuando pensemos que no estamos en riesgo y el auto-examen parezca indicar que todo está bien, debemos consultar a nuestro médico de cabecera para que nos realice pruebas clínicas que nos permitan evaluar nuestra situación de salud. Además, como miembros de una comunidad, debemos promover que otras personas, incluyendo familiares, compañer@s y amig@s, gocen del mejor estado de salud posible. Aunque todavía no existe una cura para este mal, la prevención sigue siendo nuestra mejor defensa.
(Fuente: orgulloboricua.net)
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