La Cámara de Diputados de Chile ratificó con 78 votos a favor, 9 en contra y 4 abstenciones, la aprobación del proyecto que establece el Acuerdo de Unión Civil (inicialmente llamado Acuerdo de Vida en Pareja), que regula la convivencia y crea un nuevo estado civil accesible a parejas heterosexuales y homosexuales, una demanda histórica de la comunidad LGBTI.
Tras cuatro años de tramitación, la ley crea el "Acuerdo de Unión
Civil" (AUC), que hace posible a las parejas que conviven sin estar
casadas compartir bienes a nivel jurídico, recibir herencias y
pensiones, afiliarse al sistema de salud de la pareja, entre otros derechos.
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El texto legal precisa que el AUC es un contrato celebrado entre dos personas que comparten un hogar, con el propósito de regular los efectos jurídicos derivados de su vida afectiva en común, de carácter estable y permanente. Los contrayentes se denominarán convivientes civiles y serán considerados parientes para los efectos previstos en el Código Civil chileno.
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La iniciativa había sido enviada al Senado por el presidente conservador Sebastián Piñera en el 2011 y fue modificada por la actual mandataria socialista Michelle Bachelet para lograr una tramitación más expedita.
La aprobación se enmarca dentro de la estrategia que impulsa Bachelet de políticas antidiscriminación y discusión de temas “tabués”, como la despenalización del aborto terapeútico y por violación; o la mayor integración de homosexuales en labores de las Fuerzas Armadas.
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